El general Aharon Haliva, jefe de Inteligencia del Ejército israelí, anunció este lunes 22 de abril que renuncia a su cargo debido a fallos en la seguridad que permitieron el sorpresivo ataque de Hamás, el pasado 7 de octubre, la mayor agresión dentro del territorio de Israel, desde que fue establecido como Estado.
La institución castrense publicó un comunicado con su carta de dimisión, anunciando que, sin embargo, permanecerá en el cargo hasta que se designe un sucesor. Entretanto, las tropas del Estado de mayoría judía continúan los ataques en la Franja de Gaza, donde en las últimas horas la cifra de muertos aumentó a 34.151.
Es el primer alto comandante israelí que deja su puesto tras los ataques del 7 de octubre: Aharon Haliva reconoció en su carta de renuncia que la división de Inteligencia a sus órdenes “no estuvo a la altura de cumplir con la tarea que se le fue encomendada”.
El general ya había aceptado su parte de responsabilidad en el sangriento ataque de Hamás- que hace más de seis meses detonó la escalada en curso de la guerra en Gaza- al no prever ni prevenir la incursión del movimiento islamista en territorio israelí.
En un comunicado, publicado este 22 de abril, el Ejército israelí anunció que la decisión de Haliva de dejar el cargo fue tomada “con el jefe del Estado Mayor y con la aprobación del ministro de Defensa”, por lo que el militar concretará su dimisión “una vez que su sucesor sea designado”.
El 7 de octubre de 2023 significó el mayor ataque en la historia de Israel. Los militantes de Hamás burlaron las barreras de alta tecnología alrededor de la Franja de Gaza, tomando por sorpresa a las fuerzas israelíes y cobrando la vida de alrededor de 1.200 personas, en su mayoría civiles, tanto israelíes, como extranjeros. Otras 240 personas fueron secuestradas y actualmente 133 permanecen como rehenes en Gaza, según las estimaciones del Gobierno de Benjamin Netanyahu.
“He llevado ese día negro conmigo desde entonces”, remarcó Haliva en su carta de renuncia.
Herzi Halevi, jefe del Estado Mayor de Israel, y Shin Bet, jefe de la agencia de Inteligencia Doméstica, también aceptaron su parte de responsabilidad en los fallos de seguridad del 7 de octubre, pero no ha habido indicios de que dejarán sus cargos mientras dure la guerra.
A finales de febrero, el Ejército israelí inició una investigación interna para analizar la respuesta de las tropas al ataque de Hamás. Se espera que Halevi presente los resultados a principios de junio.
Por su parte, Netanyahu no ha reconocido ninguna parte de responsabilidad en los ataques, pese a que encuestas de opinión revelan que la mayoría de la población israelí lo culpa de no haber hecho lo suficiente para prevenirlos.
Según la encuesta del Instituto de Democracia de Israel, publicada el 22 de abril y realizada entre el 14 y 17 del mismo mes, el 62% de la población israelí considera que ha llegado el momento de que dimitan los responsables de los fallos en la respuesta al ataque.
En respuesta al asalto, Israel inició la actual ofensiva, marcada por constantes bombardeos contra la infraestructura civil, incursiones terrestres en Gaza y bloqueos al acceso de la ayuda humanitaria. Aunque Israel señala que sus operaciones se centran en objetivos de Hamás y su aliada la Yihad Islámica, la gran mayoría de muertos en más de seis meses de hostilidades son civiles.
Entretanto, el Ejército israelí continúa el asedio con ataques por aire y tierra a lo largo de la Franja de Gaza. En las últimas 24 horas, al menos 55 personas fueron asesinadas y la cifra total de víctimas mortales ascendió a al menos 34.151 palestinos, en su mayoría mujeres y niños. Asimismo, el total de heridos aumentó a 77.084, reportó el Ministerio de Salud gazatí este lunes.