Vierte excedentes desde el 3 de septiembre para “no repetir errores” por intervenciones tardías en gobiernos anteriores

Chihuahua. Tras las recientes lluvias atípicas ocurridas entre los meses de agosto y septiembre, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) realiza extracciones de control en la presa El Granero, ubicada en el municipio de Ojinaga, para evitar inundaciones que pongan en riesgo a la población y cultivos, señaló el delegado de los Programas para el Bienestar en Chihuahua, Juan Carlos Loera de la Rosa.

Debido al almacenamiento que registra la presa, dijo que la Conagua coordina acciones con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional, autoridades municipales y del Estado para “no repetir errores” y evitar tragedias como la ocurrida hace algunos años, y que tuvo que ver una intervención tardía de autoridades anteriores.

El también representante del Ejecutivo federal en la entidad indicó que desde el 3 de septiembre, y antes de que el cuerpo de agua se llenara de manera visible, la Conagua empezó a regular la salida de agua a un flujo que pudiera soportar el Río Conchos.

“Se ha ido aumentando este flujo, este gasto, regulándolo; es decir, que vaya saliendo el agua poco a poco; ya así llena la presa se ha aumentado hasta en unos 400 metros cúbicos por segundo para evitar inundaciones”, detalló.

Loera de la Rosa reconoció la labor que realiza la Conagua para regular el pasaje de agua a través de un mecanismo de cinco compuertas que se ubican a la altura del vertidor y que otras presas no cuentan.
Detalló que es una obra de ingeniería construida para la protección civil y agradeció a la población de Ojinaga por las muestras de solidaridad que ha manifestado con elementos del Ejército y con trabajadores de Conagua.

“El Gobierno del México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador está muy pendiente de lo que está ocurriendo, yo he estado en contacto con la directora nacional de Protección Civil, Laura Velazco, se le está informando todo lo que está ocurriendo y lo que se hace para prevenir”, agregó.

Extracción escalonada

Por su parte, el director de la Conagua en la entidad, Ángel Félix Sánchez, explicó que la presa Luis L. León, popularmente conocida como “El Granero”, tiene una capacidad de almacenamiento de 284 mil 382 millones de metros cúbicos de agua para su operación.

Indicó que se trata de una presa para riego de zonas agrícolas, pero además la ventaja en su infraestructura son las compuertas con que cuenta, a diferencia de Las Vírgenes y La Boquilla, pues gracias a estas salidas sobre sus vertedores permite tener mayor control para manipular el gasto de salida, indicó el funcionario federal.
Al detallar cómo ha sido la operación de esta presa gracias a sus compuertas, dijo que la orden fue abrir primero 1.05 metros, para controlar hasta 150 metros cúbicos por segundo de salida, luego fue abierta hasta los 1.25 metros para controlar hasta 300 metros cúbicos por segundo de la salida de agua.
En la medida que va entrando agua a la presa por los diferentes afluentes que la alimentan, y no se abren más las compuertas, el agua en la presa sube su nivel, por tanto, la presión del agua sobre las compuertas es mayor y a simple vista se puede observar más fuerza en la salida del agua por las aberturas, dijo Félix Sánchez.
De acuerdo con datos técnicos, la entrada de agua en la parte baja es de 763.9 metros cúbicos por segundo y actualmente se extraen de manera controlada 287 metros cúbicos del vital líquido, sostuvo el titular de Conagua en Chihuahua, quien insistió que con estas acciones se trabaja con la regulación del vaso mediante extracciones reguladas y ello puede dar mayor tranquilidad los habitantes de ese sector del estado.
Agregó que acuerdo a las valoraciones entre el miércoles y jueves pudiera aumentar la extracción de agua en “El Granero” hasta los 350 metros cúbicos por segundo, e incluso se prevé llegue a los 400 metros cúbicos.
Señaló que con estas acciones se abona al tratado de aguas entre México y Estados Unidos firmado en 1944, por lo que además resulta útil este tipo de estrategias para ambas naciones, pues por un lado se salva guarda la integridad y patrimonio de las personas y por otro se atiende lo estipulado en el tratado, ya que los escurrimientos van al Río Bravo. Sostuvo que de continuar las lluvias como se tiene previsto se continuará con la extracción de agua.

Mantienen monitoreo constante

Aunque la presa es muy segura se debe estar en constante monitoreo, pues tiene capacidad para almacenar hasta 800 millones de metros cúbicos de agua con las compuertas cerradas, por ello esta característica que no tienen las otras presas se aprovecha de la mejor manera, para manejar mayor control de avenidas y poco a poco extraer agua por el vertedor siempre que llegue a partir de los 284 millones de metros cúbicos.

Estas acciones deben ser supervisadas por personal especializado en todo momento, de lo contrario se corre el riesgo de producir desbordes, al extraerse volúmenes de agua mayores a los indicados, por ello lo remendado es no sobre pasar los 400 metros cúbicos por segundo de extracción por los vertederos, advirtió.

La recomendación final es hacer caso a las medidas preventivas que hacen las autoridades de los tres órdenes de gobierno para evitar tragedias en estos vasos de agua, que por ahora se muestran espectaculares, no ostante las consecuencias de acercarse demasiado o entrar en ellas puede tener resultados fatales.


Loera de la Rosa dio a conocer que paralelamente al trabajo que realiza Conagua, el Ejército Mexicano apoya en labores de prevención para que en caso de inundación apoyar a los afectados y se trabaja reforzando puntos débiles en el bordo de protección, con maquinaria propiedad del Gobierno del Estado.
Por su parte, la Secretaría de Bienestar está participando con el levantamiento de un censo para ubicar las zonas de riesgo.

Explicó que ya se han entregado apoyos alimentarios, cobijas y colchonetas en Cuauhtémoc, Casas Grandes, Ascensión, Janos, Meoqui y Julimes.

“Esperemos que así sea, estamos muy confiados porque se está haciendo lo que no se hizo en el 2008; en el 2008 se actuó tarde para regular el agua de la presa”, concluyó.

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