Con uso de fuerza, policías antidisturbios desmantelaron el campamento a favor de los derechos de Palestina instalado en UCLA durante casi una semana.
Agentes policiales de California, al oeste de Estados Unidos, asaltaron en la madrugada de este jueves el campamento propalestino instalado desde hace casi una semana en el campus de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA), con saldo de decenas de jóvenes detenidos.
Aunque por razones de seguridad los manifestantes habían rodeado el campamento instalado en Royce Quad con separadores de metal y chapas de madera, la Policía se abrió paso y trató de dispersarlos para acallar otra de las tantas protestas que estallaron en las últimas semanas en universidades de EE.UU. y otras naciones para condenar el genocidio de Israel contra Palestina.
De acuerdo con reportes de prensa, hubo varios detenidos aunque no se precisó la cifra exacta. Videos difundidos a través de las redes sociales muestran a policías disparando balas de goma contra los jóvenes, aunque también había allí docentes y otros integrantes de la comunidad universitaria.
Presentes en el plantón denunciaron que las autoridades violan su derecho constitucional a la libertad de expresión.
Estos decidieron mantener su protesta pacífica a pesar de que, horas antes, la Policía amenazó con arrestarlos por incurrir en actos no permitidos en el reglamento de la UCLA, cuya directiva declaró ilegal el campamento.
El martes en la noche quienes permanecían en Royce Quad fueron agredidos por manifestantes prosionistas, quienes les arrojaron palos, piedras, gas pimienta y petardos mientras repetían la narrativa de que los jóvenes a favor de los derechos de Palestina son antisemitas.
Esa noche se reportaron 25 manifestantes propalestinos heridos. Según medios, no hay detenidos entre los prosionistas. La Policía señaló que ellos no estaban presentes cuando los disturbios estallaron, mientras aumentan las sospechas de que la fuerza públicamente sabe quiénes fueron y alienta que actúen como una banda paralela.
Aunque en la madrugada de este jueves la Policía desmanteló el campamento y echó abajo las carpas, medios locales señalaron que un grupo de manifestantes aún permanece allí y repite eslóganes en solidaridad con Palestina y en rechazo a los crímenes de guerra israelíes en Gaza.
Además, demandan a las autoridades universitarias que se desvinculen de negocios con la entidad sionista o no acepte financiamientos provenientes de ella.