El presidente Andrés Manuel López Obrador, mencionó que la economía y las finanzas del país están en un buen momento, esto en relación a la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB) en Estados Unidos.
«Está bien la economía y les puedo decir que ahora no es como en los tiempos del neoliberalismo. [En esa época], a Estados Unidos le daba una ‘gripita’ y acá nos daba pulmonía. Ahora es al revés: allá pueden quebrar los bancos y aquí no pasa nada o solo cosas buenas», indicó en su conferencia de prensa.
El mandatario mexicano agregó que durante el año pasado se registraron alrededor de 250.000.000.000 de pesos en utilidades por parte de la banca nacional.En este mismo tenor, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) de México confirmó el 15 de marzo que el sistema financiero en el país es fuerte y sólido.»Ninguno de los bancos de importancia sistémica local tiene una concentración significativa en depositantes de mayor volumen ni en algún sector de actividad económica en particular», expuso la entidad bancaria latinoamericana en un comunicado.
En el documento, la CNBV agregó que no ve una alta posibilidad de que ocurra algo similar a lo de Silicon Valley Bank en México.»La estructura de captación de los bancos muestra una apropiada diversificación respecto a sectores económicos atendidos, así como una base muy sólida de depositantes minoristas, lo que la hace diametralmente opuesta al portafolio de depósitos de SVB. Por lo anterior, difícilmente las causas de quiebra de SVB se replicarían en México», resaltó.
A partir del 10 de marzo, fecha en la que el SVB fue intervenido por las autoridades de Estados Unidos debido a su falta de liquidez y sus acciones fueron suspendidas de Wall Street, el mercado de valores reaccionó de manera negativa en México y gran parte del mundo.
«El efecto inmediato sobre el sector financiero mexicano fue una pérdida de valor en algunas de sus acciones. Esta disminución de precios fue un resultado impulsado por el anuncio del cierre», destacó la comisión bancaria.»El efecto se da principalmente por la decisión de inversionistas institucionales de disminuir su posición en instituciones bancarias a nivel global y no por percibir especiales riesgos en los bancos mexicanos», concluye el comunicado.