Ingresaron armas largas al cereso en Juárez, para que un grupo agrediera a otro, lo que desató la ola de violencia y terror, sin que la autoridad estatal haya informado algo al respecto…
Chihuahua. Morena se manifestó en contra de la estrategia de seguridad del gobierno de Eugenia Campos, que ha culminado con los hechos de sangre y terror que se vivió en ciudad Juárez el pasado jueves, que dejó un saldo oficial de 11 personas muertas, entre ellos mujeres trabajadoras, un niño de 12 años, cuatro trabajadores de los medios de comunicación entre otras víctimas inocentes.
El coordinador de los diputados morenistas Cuauhtémoc Estrada, manifestó la postura de la bancada en la sesión de la diputación permanente, donde solicitó a la gobernadora, valorar la destitución del fiscal ante los resultados que se dieron.
Compañeras y compañeros diputados, la noche del jueves pasado, cuando aún no terminaba la crisis de violencia o inseguridad en Juárez, la fracción parlamentaria de MORENA emitía un posicionamiento. Lo hicimos por varias razones: primeramente por la gravedad de lo acontecido, por la pérdida de la vida de personas inocentes, por el estado de inseguridad y violencia en el que como sociedad se nos sometió, pero, también, porque advertimos a escasas horas de iniciada la violenta jornada actitudes que no contribuyen a solventar un estado de emergencia. Por ello, afirmamos que no era el momento para dividir, que la crisis de inseguridad que estábamos padeciendo debía afrontarse con valentía, responsabilidad y madurez; que la forma de poder revertir la dificultad que como estado teníamos en ese momento era con unidad y estrategia, que los verdaderos adversarios de las víctimas y de la sociedad eran los delincuentes.
Hoy, visto en retrospectiva, nos toca examinar lo sucedido. ¿Qué generó ese tipo de violencia atípica? ¿Era previsible una reacción con esa vileza del crimen organizado en la ciudad? ¿Existe dentro del trabajo de inteligencia de las corporaciones policiacas elementos que pudieran indicar el riesgo que corrían los habitantes de Juárez? ¿Qué antecedentes teníamos registrados de esos grupos criminales? ¿Qué sucedió en el Centro de Readaptación número 3 de Ciudad Juárez? Esas y otras interrogantes están vigentes y, aunque seguramente la autoridad investigadora competente podrá dar respuesta a todas y cada una de las anteriores interrogantes, resulta conveniente establecer lo siguiente:
1.- No es la primera vez que al grupo criminal que se le denomina los Mexicles se le atribuyen hechos delictivos como los ocurridos el jueves pasado; recordemos que en noviembre del 2019, derivado de una revisión al interior del Centro de Readaptación Número Tres, con sede en Ciudad Juárez, se generó una ola violenta que derivó en la pérdida de la vida de 10 personas, seis personas heridas y aproximadamente 15 vehículos incendiados. De igual forma, en enero de 2022, se presentó otra jornada violenta y, según afirmación de la propia Gobernadora María Eugenia Campos Galván, esa violencia se originó en el interior del Cereso Número Tres, dejando como saldo 9 vehículos incendiados, una tienda y una caseta de vigilancia.
Los anteriores antecedentes nos indican que no es nueva la reacción de los grupos criminales que operan al interior del Cereso, que lo sucedido el día jueves era previsible, que existían antecedentes plenamente conocidos por la autoridad para poder prever reacciones violentas como las que sucedieron, lo que nos lleva a las siguientes preguntas: ¿Por qué no se previó la posible reacción? ¿Por qué no se tomaron las medidas provisorias necesarias que pudieran evitar el asesinato de personas inocentes, si de sobra se conocía el modus operandi del grupo delincuencial?
2.- De lo expuesto con anterioridad, no puede separarse el motín que se generó en el CERESO NÚMERO 3 de ciudad Juárez el Jueves Negro, y con ello surgen más interrogantes: ¿Cuáles fueron las causas que lo originaron? ¿Por qué se perdió el control del penal? ¿Cómo es que los reos contaban con armas de fuego al interior del reclusorio? ¿Quién controla el penal? ¿Qué ha hecho la autoridad penitenciaria en favor de la seguridad y control del penal, si desde que tomó posesión esta nueva administración conoce los antecedentes de ese centro? ¿Qué medidas tomará la titular del Ejecutivo ante las evidentes omisiones (por decir lo menos), de quienes tienen a su cargo el mando formal en el penal? ¿Cuál ha sido el actuar del Fiscal General del Estado ante la situación del penal, pues la Dirección General del Sistema Penitenciario estatal depende orgánicamente de la Fiscalía a su cargo?
Quien puede y debe dar respuesta a las anteriores interrogantes, sin duda, debiera ser el Fiscal General del Estado y no dudo que lo haga a través del algún informe, acompañado de diversos peritajes. Sin embargo, resulta imprescindible que ante esta asamblea legislativa comparezca tanto el Fiscal General del Estado, como el Secretario de Seguridad Pública Estatal.
Recordemos, compañeras y compañeros diputados, que en semanas anteriores, cuando la violencia dio signos de desbordamiento, con hechos trágicos como el del restaurante Denny’s en Juárez y el asesinato de dos sacerdotes y un civil en Cerocahui, ante este Congreso se solicitó la comparecencia de ambos funcionarios, ello en términos de la facultad que le otorga la Constitución del Estado a esta asamblea legislativa; sin embargo, la solicitud fue negada bajo el argumento de que no era necesaria la comparecencia, incluso se llegó a manifestar que los funcionarios sobre los cuales se requería su comparecencia debían mejor emplear ese tiempo en las tareas propias de su encargo. Hoy lamentablemente vemos que no fue así, los resultados sobre violencia nos dicen que no fue así, los hechos inhumanos sucedidos en Juárez el pasado jueves nos dicen que no fue así. Por ello, de nueva cuenta ya no insistimos, exigimos la comparecencia ante esta asamblea legislativa de los funcionarios referidos, lo hacemos no solo por la facultad que nos otorga el artículo 64 de nuestra Constitución Local, sino también porque la decisión de puertas cerradas de los funcionarios públicos ante hechos tan lamentables resultan en estrategias fallidas; en nada abona un funcionario público con tareas tan sensibles como la seguridad de la población si cuando se le requiere para que comparezca ante una asamblea como esta es protegido por una mayoría parlamentaria pensando que si no comparece sus malos resultados no serán percibidos por la sociedad.
3.- Con independencia de la comparecencia que se exige respecto al Fiscal General, resulta necesario recordar que la fracción parlamentaria de Morena otorgó voto de confianza a la Gobernadora cuando en fecha 21 de septiembre del 2021 se le aprobó su propuesta para ocupar la Fiscalía General del Estado.
En aquel momento, nuestra fracción parlamentaria emitió posicionamiento y estableció que era un voto de confianza no al Fiscal, pues poco conocíamos de su trayectoria sino que era un voto de confianza a la Gobernadora del Estado, quien realizaba la propuesta y. por lo tanto, con ello avalaba al hoy Fiscal en el sentido que consideraba que era la persona idónea para el desempeño de ese cargo.
Hoy, a once meses del nombramiento del fiscal, resulta imperativo preguntarnos si quien lo propuso y quienes otorgamos ese voto de confianza hicimos o no lo correcto. No se trata de una cuestión personal contra el fiscal, nosotros como fracción le concedimos nuestro voto en esta asamblea legislativa cuando la gobernadora lo propuso; sin embargo, los resultados de su gestión no son halagadores, al menos los resultados que conocemos, pues recordemos que una parte de esta asamblea legislativa ha pedido su comparecencia y ésta ha sido negada, hecho éste por demás irónico, pues tenemos la facultad para nombrarlo, pero no el poder para que comparezca periódicamente y de cuentas de su actuar. Ello necesariamente nos debe llevar, al menos, al análisis de si la Fiscalía General requiere modificaciones en la designación de su titular, entendiendo que es una facultad que por competencia inicial le corresponde a la gobernadora Campos, en términos de los que dispone el artículo 93 de nuestra Constitución Local, por ello lo exponemos, esperando que la titular del Ejecutivo se pronuncie sobre esta posibilidad.
4.- Otro aspecto que resulta difícil separar del tema de seguridad en el estado, pero en especial en Ciudad Juárez, es el relativo a la llamada Torre Centinela, un proyecto polémico por diversas causas: 1.- Una decisión prácticamente unilateral de la gobernadora, sin un respaldo de consulta previa a la comunidad juarense; 2.- la designación de una empresa cuestionada, como Seguritech, con adjudicación directa para el gasto de miles de millones de pesos de los chihuahuenses;
3.- Opacidad en el gasto de la obra, pretendiendo justificar esa falta de trasparencia en el pretexto de que se trata de aspectos sensibles de seguridad;
4.- La falta de un proyecto -o al menos su socialización- técnico pericial que, con bases científicas, concluya que la construcción de la famosa torre resulta necesaria para afrontar la inseguridad en Juárez, pero, a la vez, que ese estudio confronte si la inversión de la torre no tendría una mejor aplicación o uso, acercando seguridad a las áreas del poniente y sur de la ciudad, ya sea con la contratación de más elementos policiacos y de más comandancias o estaciones policiales distribuidas en la mancha urbana.
Actualmente tenemos un centro de readaptación social con muchísimas deficiencias, sin revisiones periódicas efectivas, con sobrepoblación, un tortuguismo judicial que abona a la sobrepoblación en los penales y eso hace que lamentablemente, como ocurrió el jueves pasado, los conflictos en el interior del penal se reflejen inmediatamente fuera de él con consecuencias muy trágicas para la población. Ante ello, nos cuestionamos: ¿Acaso no es mejor invertir en más y mejores policías que en una torre de relumbrón? ¿Que no le brindaría una mejor seguridad a la población juarense y chihuahuense el que los penales del estado se encuentren en pleno control de la autoridad, sin riesgo de que desde allí se generen los actos delictivos al exterior?¿ Acaso no es mejor contar con comandancias o estaciones de la policía estatal cercanas a toda la mancha urbana, aunque estas no parezcan grandes obras arquitectónicas, pero que, sin duda, bien manejadas pueden ser plenamente operativas, no solo porque se distribuye a los cuerpos policiaco en la mancha urbana sino, también, porque se le da oportunidad a la ciudadanía de acudir en caso necesario a una estación de policía cercana, en donde pueda poner una queja o denuncia, donde ese ciudadano sienta la cercanía con su cuerpo de seguridad. Actualmente, ese mismo ciudadano, el mayor acercamiento que tiene con su policía es cuando ve pasar, y no precisamente en forma continua, una patrulla por alguna calle o avenida de su colonia.
Compañeras y compañeros diputados, sin duda debemos darnos la oportunidad de analizar si el proyecto de Torre Centinela, en los términos hasta hoy planteados es lo mejor que en materia de seguridad podemos brindar a Chihuahua y en especial a Juárez.
Por último, compañeras y compañeros diputados, reitero por parte de la fracción parlamentaria de Morena que la coordinación de los tres niveles de Gobierno, acompañados de los demás entes públicos, llámese asambleas legislativas, poder judicial y órganos autónomos, resulta el elemento esencial para poder dar un combate eficaz a la delincuencia; discutamos las ideas, discutamos los proyectos, démonos la oportunidad de confrontar las diversas formas de cómo pensamos que se puede afrontar el flagelo de la inseguridad, pero vayamos unidos en esta tarea, sin distingos de colores, porque, no obstante que podamos tener ideologías diversas, convencido estoy que todos en esta asamblea legislativa le apostamos a que nuestra sociedad goce de un ambiente seguro.
Ante ello, hacemos un llamado enérgico, responsable e inmediato a todas las fuerzas policiacas y de inteligencia de todos los niveles de gobierno, emanados de cualesquier partido político (porque eso no importa), para que a través de las mesas de la paz, diseñadas para ese efecto, lleven a cabo todas las acciones necesarias que nos permitan a los Juarenses, Chihuahuense y Mexicanos alcanzar la paz, combatir la violencia y vivir con seguridad.