Gaza, Palestina. Un vídeo que muestra a un estudiante de 20 años envuelto en llamas dentro de su tienda de campaña tras un bombardeo de Israel contra el patio de un hospital de la ciudad de Deir al Balah se volvió viral como muestra de la brutalidad israelí.
El hermano de, Shaaban Ahmed Al Dalu, el joven palestino que murió envuelto en llamas luego de que su tienda de campaña fuera bombardeada por Israel en el patio del hospital de los Mártires de Al Aqsa, en el centro de la Franja de Gaza, relató que Shaaban y su madre ardieron ante sus ojos.
Se volvió viral en redes sociales el video de la trágica muerte de Shaaban Ahmed Al Dalu, un estudiante de ingeniería de sistemas de 20 años, en el que se le ve gritando pidiendo ayuda mientras es consumido por las llamas.
El fuego destruyó varias tiendas de campaña, causó la muerte de cuatro desplazados palestinos, entre ellos Shaaban y su madre, e hirió a más de 40 personas más, según el Ministerio de Salud del enclave.
«Shaaban no era solo un hermano, era un amigo y un apoyo. Perderlo es insoportable», dijo su hermano menor, que no dio su nombre.
Entre lágrimas, el hermano afligido recordó la trágica noche.
«A la 1:30 de la madrugada, nuestra tienda fue atacada. Yo estaba durmiendo en la tienda de al lado y no pude salvarlos. Los vi arder», relató mientras las lágrimas corrían sobre su rostro.
«Shaaban y mi madre murieron quemados ante mis ojos. Nuestra familia está dispersa ahora, cada uno de nosotros en un lugar diferente. Mi hermana resultó herida y fue hospitalizada. Mi padre también fue hospitalizado en Jan Yunis», expresó.
La familia de Shaaban fue desplazada después de que su casa fuera destruida en un ataque aéreo israelí, lo que los obligó a refugiarse en una tienda de campaña en los terrenos del hospital de la ciudad de Deir al Balah.
A pesar de la guerra, la joven víctima siguió comprometido con su educación, al estudiar en línea. Cada día, tenía que viajar largas distancias para acceder a Internet y mantenerse al día con sus clases.
Sus esfuerzos estaban impulsados por la esperanza de asegurar un futuro mejor para su familia, que se había visto obligada a desplazarse por la guerra, explicó su hermano.
Sin embargo, esa noche, cuando los aviones de guerra israelíes atacaron el campamento de tiendas, Shaaban no tuvo ninguna posibilidad de escapar. Las llamas, lo consumieron a él y a su tienda, extinguiendo tanto sus sueños como su vida.
Antes de su muerte, Shaaban compartió una publicación en su cuenta de Instagram en la que expresaba su sufrimiento bajo la guerra israelí.
«Solía soñar en grande, pero la guerra destruyó esos sueños. Me ha abrumado, dejándome enfermo física y mentalmente. Sufro de depresión y pérdida de cabello debido al trauma continuo», indicó.
También expresó su esperanza de un futuro más brillante para su familia y los niños que sufren los horrores de la guerra, y pidió a la gente que apoyara a los palestinos desplazados y aliviara su sufrimiento.
«El momento más doloroso esa noche fue verlo arder frente a todos, sin que nadie pudiera ayudarlo. Las llamas consumieron todo y nadie pudo acercarse debido al enorme incendio», recordó su hermano.
A pesar de las dificultades causadas por la guerra y el asedio israelíes, Shaaban se aferró a sus sueños. Memorizó el libro sagrado del Islam, el Corán, y se propuso construir un futuro mejor para él y su familia.
Trabajó incansablemente para ayudar a su familia a hacer frente a las devastadoras circunstancias de la guerra, destacó su hermano.
«Una semana antes de que lo mataran, Shaaban estaba recitando el Corán en la mezquita cercana al hospital de los Mártires de Al Aqsa. Terminó de recitarlo alrededor de la 1 a.m., y aproximadamente media hora después, aviones de guerra israelíes bombardearon la mezquita. Sobrevivió milagrosamente a ese ataque», agregó.
Shaaban sufrió heridas leves en el incidente y regresó para quedarse con su familia en su tienda de campaña en los terrenos del hospital, sin saber que en unos días se reuniría con sus compañeros de la mezquita.
Israel continúa su brutal ofensiva en Gaza después de un ataque transfronterizo del grupo palestino Hamás el 7 de octubre del año pasado, a pesar de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que pide un alto al fuego inmediato.
Cerca de 42.400 personas han muerto desde entonces, en su mayoría mujeres y niños, y más de 99.000 han resultado heridas, según las autoridades de salud locales.
La ofensiva israelí ha desplazado a casi toda la población de la Franja de Gaza en medio de un bloqueo permanente que ha provocado una grave escasez de alimentos, agua potable y medicamentos.
Israel se enfrenta a un caso de genocidio en la Corte Internacional de Justicia por sus acciones en Gaza.
*Mohammad Sio y Aicha Sandoval Alaguna contribuyeron con la redacción de esta nota.