En el lugar 27 de los 32 gobernadores.
Chihuahua. De mal en peor la imagen de la gobernadora María Eugenia Campos Galván, quién ha caído en la lista de gobernadores de Mitofsky en el último mes del 2022, entre junio y julio.
De acuerdo a la encuesta que realiza mensualmente la encuestadora Mitfsky, la gobernadora panista de Chihuahua mantiene su racha de caída en la aceptación que tiene ante los chihuahuenses, en comparación con los otros 31 mandatarios de todo el país.
Eugenia Campos cae al lugar 27, el último en los de «aceptación media», a un lugar de caer en «la mala aceptación», incluso el gobernador Cuauhtémoc Blanco, estaría en una mejor posición.
La caída de la aceptación de Eugenia Campos puede deberse principalmente a la inseguridad y incremento de homicidios que azota el estado meses atrás, y que detonó una crisis tras el asesinato de los dos sacerdotes jesuitas en Cerocahui, a manos de un líder criminal que aún se encuentra prófugo.
Por otro lado, hay una percepción ciudadana de que la principal política de la gobernadora es para recaudación, derivado del paquete presupuestal aprobado por mayoría de los diputados del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano en diciembre pasado, donde se incrementaron la mayoría de los impuestos, así como la obligatoriedad para el replaque, y recientemente el escándalo del cobro obligatorio de uniformes en los colegios del Cobach.
Otro tema que ha dañado la imagen de la mandataria es su escasa actividad en tierra, y sus viajes a Europa, lo cual coincidió con las vacaciones de la burocracia y que se intentó justifica ante la opinión pública como una «gira de negocios», donde se atraería inversión extranjera, aunque los anuncios realizados se trata de amarrar acuerdos que derivan desde la pasada administración, en redes sociales los ciudadanos calificaron este viaje como vacaciones de la gobernadora.
Además, el estigma que carga la gobernadora por su proceso judicial que le inició el ex gobernador Javier Corral, de su mismo partido, por ser parte de la nómina secreta de César Duarte y que la llevó a juicio y procesos judiciales que en cuanto llegó a la gubernatura, fueron desechados en el Poder Judicial.
Hay una imagen de corrupción que rodea la figura de Eugenia Campos y que intenta desviar al cometer el mismo error que su antecesor, perseguir al pasado gobernador, y que los ciudadanos de a pie consideran una venganza política.
No se diga de la conciencia de los chihuahuenses en el control mediático que existe gracias a los millones de pesos que se destinan del presupuesto a los medios de comunicación para proteger la imagen de la gobernadora, y que tal descaro hace burdo la información que aplaude y engrandece a Eugenia Campos, mientras que la respuesta en redes evidencia un rechazo ciudadano.
