El Ministerio de Defensa de Rusia informó que fueron rescatados 80 civiles de la planta metalúrgica de Azovstal en la ciudad de Mariúpol, donde neo nazis del batallón Azov los tenían retenidos.
«Gracias a la iniciativa del presidente de Rusia, Vladímir Putin, del territorio de la planta Azovstal en Mariúpol fue posible rescatar a 80 civiles de mantenían en cautiverio los ultranacionalistas ucranianos, entre ellos a mujeres y niños», dijo el ente castrense.
El representante del Ministerio aclaró que las unidades de las Fuerzas Armadas rusas y las milicias de la República Popular de Donetsk abrieron un corredor humanitario para la evacuación segura de los civiles y proporcionaron un cese al fuego.Todos los liberados fueron evacuados a la localidad de Beziménnoye, en la RPD, donde se les proporcionó alojamiento, comida y se les ofreció la atención médica necesaria.
Los civiles evacuados por el personal militar ruso de Azovstal que deseaban viajar a las áreas controladas por el régimen de Kiev, fueron entregados a representantes de la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja.Una de las empleadas de Azovstal, Natalia Usmánova, afirmó que allí se encuentra un mercenario con grados de general.
«Los militares venían y contaban que en el refugio subterráneo se encontraba un general, lo habían enviado, es del (grupo nacionalista prohibido en Rusia) Azov, se supone que es uno de los mercenarios y mantiene un contacto personal con Zelenski», aseguró Usmánova.
Rusia anunció el 24 de febrero el lanzamiento de una operación militar especial en Ucrania alegando que las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, necesitan ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es la desmilitarización y la desnazificación de Ucrania.Según el Ministerio de Defensa ruso, los ataques militares no están dirigidos contra instalaciones civiles, sino que buscan inutilizar la infraestructura bélica.