Ansarolá de Yemen ha prometido intensificar las operaciones en el mar Rojo hasta que Israel ponga fin a su guerra en Gaza y Estados Unidos deje de atacar a este país.

“Nos estamos preparando para una cuarta fase de escalada si el enemigo israelí y los estadounidenses continúan con su intransigencia”, aseveró el líder del movimiento popular Ansarolá de Yemen, Seyed Abdulmalik Badreddin al-Houthi, en un discurso televisado.

Al-Houthi dijo que las fuerzas yemeníes han apuntado con 606 misiles balísticos y drones contra 107 barcos israelíes, estadounidenses y británicos en el mar Rojo, el estrecho de Bab al-Mandeb, el golfo de Adén y recientemente en el océano Índico durante las operaciones realizadas desde el noviembre.

Subrayó que sólo en los últimos siete días, las fuerzas yemeníes han disparado 33 misiles balísticos y drones contra seis barcos frente a la costa de Yemen, así como contra la ciudad portuaria israelí de Eilat.

Al-Houthi agregó 40 personas han muerto y otras 35 han resultado heridas en los 452 ataques perpetrados por Estados Unido y el Reino Unido contra Yemen desde enero.

Su advertencia se produjo después de que los medios yemeníes informaran el jueves que la coalición estadounidense-británica llevó a cabo cinco ataques aéreos contra el aeropuerto de Al-Hudayda, en el oeste de Yemen.

El martes, Estados Unidos realizó otro ataque contra un puerto en Al-Hudayda.

Las fuerzas yemeníes se apoderaron de un barco vinculado a Israel, hundieron otro y lanzaron cientos de misiles y drones contra barcos en el Mar Rojo desde noviembre en solidaridad con los palestinos en un intento de presionar a Israel para que cese su guerra en Gaza.

Desde noviembre pasado, semanas después del inicio de la guerra genocida del régimen sionista contra Gaza, Yemen lleva a cabo operaciones militares contra objetivos israelíes en Palestina ocupada, así como contra barcos vinculados al régimen de Tel Aviv o los que se dirigen a los puertos israelíes, en el mar Rojo en un intento de cortar las vías de suministro de Israel y forzarlo a que ponga fin a sus atrocidades en la Franja palestina.

Por su parte, Estados Unidos y sus aliados crearon una coalición para confrontar los ataques yemeníes en el mar Rojo y suministrar la seguridad de las embarcaciones vinculadas al régimen de Israel, mediante bombardeos a objetivos civiles en Yemen.     

Esto ha provocado que Saná haya puesto en su blanco a los barcos estadounidenses y británicos.

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