El asesino de los sacerdotes Jesuitas tenía orden de aprensión, sin embargo realizaba sus actividades públicas sin problema alguno.
México. El Presidente Andrés Manuel López Obrador, exigió al gobierno de Chihuahua explicar a fondo, el asesinato de los dos sacerdotes Jesuitas y otras víctimas a manos del líder criminal, lugarteniente del cartel de Sinaloa en Urique y la región, debido a que este contaba desde 2018 con orden de aprehensión por el asesinato de un turista estadunidense.
Luego de que se le cuestionara al presidente la necesidad de investigar a los narcopolíticos y los asesinatos de periodistas por parte de políticos o partidos como los panistas en Chihuahua con la periodista Miroslava Breach, el mandatario pidió a las autoridades de Chihuahua dar una explicación a fondo, debido a que podría tratarse de un convenio entre el delincuente y las autoridades.
«Esto último de los asesinatos de los sacerdotes en Chihuahua merece una explicación de las autoridades locales, a fondo, porque ¿cómo es posible que con orden de aprehensión esta persona se moviera con toda libertad, que fuese patrocinador de un equipo de béisbol y que todo mundo supiera a que se dedicaba y no lo tocaran?, ¿por qué?, ¿cuál era su estatus? Tenía que haber ahí contubernio con autoridades».
Explicó que el tema ha sido mencionado en varias ocasiones, donde existe este tipo de contubernio o convivencia perversa, que surge de los apoyos que se dan en campañas políticas, donde los estados se descompusieron por completo porque para imponerse y hacer fraude hicieron acuerdos con grupos dedicados a la delincuencia.
«y crearon monstruos y toda una red de complicidades, de componendas», dijo.
Le dio la razón a la reportera que le cuestionó la necesidad de que se investigue el involucramiento del crimen organizado con los gobiernos en estos estados.
«Pero hay que también tener confianza porque se va avanzando. Puede haber campañas de gente sin escrúpulos, cínicos, cretinos, que dicen que es lo mismo de antes; no, no, y se prueba con hechos y con datos. No va a ser lo mismo ahora que cuando Calderón».
En Chihuahua, el líder criminal ha operado en al estado desde hace más de 10 años, en ninguna administración se le había perseguido, aún cuando es público el control que tiene en esa región, desde la administración de César Duarte, Javier Corral y ahora Eugenia Campos, que tampoco se había hecho algún movimiento en su contra, hasta el día del asesinato de los sacerdotes.