Tras el intercambio de fuego cruzado entre los grupos de Resistencia y el régimen sionista, israelíes viven un miedo sin precedentes por misiles.
Annan Nayib, un periodista palestino, ha informado este viernes al sitio web Press TV que, por el momento, las cosas están bastante tranquilas en la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén) y que la gente se está preparando para realizar las oraciones del viernes.
Esta calma, según Nayib, llega luego de que los asentamientos israelíes ilegales fueron bombardeados con misiles de la Resistencia palestina desde la Franja de Gaza, en represalia por la agresión israelí contra los fieles palestinos dentro del recinto de Al-Aqsa.
“Hay tanto miedo entre los colonos israelíes ilegales hoy, y sienten ira hacia el actual régimen israelí de extrema derecha, especialmente el ministro israelí de seguridad, Itamar Ben-Gvir, que ha estado liderando los ataques contra la Mezquita Al-Aqsa y alentando a los colonos a profanar el lugar sagrado”, subraya el periodista.
De acuerdo con Nayib, los israelíes culpan al actual régimen de extrema derecha por todas las represalias que viven. “Esta es la primera vez que vemos tanto miedo entre los israelíes dentro de la Palestina ocupada”, ha agregado.
La ciudad de Al-Quds se mantiene firme frente a la agresión israelí y la gente y los fieles se niegan a abandonar los alrededores de Al-Aqsa. Al respecto, el periodista palestino ha sostenido que Israel se ha dado cuenta de que Al-Quds es la mecha de la bomba que puede prender fuego no solo a Palestina, sino a toda la región, por lo que el ejército israelí parece haber retrocedido en su violencia contra los palestinos en las inmediaciones del lugar sagrado.
Los combatientes de la Resistencia con base en Gaza dispararon el miércoles al menos nueve cohetes hacia zonas israelíes en los territorios ocupados. También, el jueves, 34 cohetes fueron disparados desde El Líbano hacia los territorios palestinos ocupados por Israel en represalia por las incursiones israelíes contra el complejo sagrado.
El lanzamiento de estos cohetes se realizó en respuesta al brutal ataque de los sionistas contra los fieles palestinos en la Mezquita Al-Aqsa y se considera como una medida para la “unificación de los campos” dentro y fuera de los territorios ocupados.